Los tejidos y órganos internos del abdomen se mantienen en su lugar gracias a una pared externa formada por músculos y sus aponeurosis (membranas que envuelven a los músculos). A todo el conjunto de músculos y aponeurosis se le conoce con el nombre de pared abdominal.
La estabilidad de la pared abdominal depende de la integridad de sus músculos y aponeurosis.
La pared abdominal tiene propiedades únicas que permiten el movimiento y equilibrio cuando realizamos algún esfuerzo, estas propiedades dependen del tejido que las constituyen: la colágena y su tejido conectivo. Cuando se altera la producción de estas sustancias, por ejemplo en la deficiencia de vitamina C (escorbuto) y en pacientes fumadores, se asocian con la formación de hernias.
Una hernia se define como un área de tejido de la pared abdominal debilitada o desgarrada. Cuando se produce una hernia de pared abdominal, un área de dicha pared se debilita o se desgarra, los tejidos o los órganos que normalmente están sostenidos por la pared abdominal sobresalen a través del punto débil.
Las hernias de pared abdominal se clasifican según la región de la pared abdominal donde se presentan
- Hernia ventral: Se presentan en la parte anterior de la pared abdominal e incluyen hernias umbilicales, epigástricas, Spiegel, paraestomal. Las más frecuentes son las incisionales, estas pueden surgir a través de la cicatriz de una cirugía abdominal previa
- Hernia inguinal: Son las hernias que surgen en la región inferior del abdomen, donde el muslo se une con la cadera. Las hernias inguinales incluyen también las hernias femorales
- Hernias de la pared lateral: Las hernias del flanco pueden protruir a través de un punto débil de la musculatura de la espalda e incluyen las hernias lumbares
Las hernias de pared abdominal pueden ser clasificadas según sus causas
- Hernias congénitas: El defecto en la pared abdominal está presente desde el nacimiento
- Hernias adquiridas: El defecto se desarrolla como resultado de una debilidad o desgarro de la pared abdominal debido a defectos en los tejidos que la componen, por ejemplo en pacientes con cirugías previas y por efecto de algunos medicamentos.
La frecuencia de hernias inguinales en la población general es de alrededor de 15%, mientras que las hernias umbilicales es de 5%, y entre 12 y 15% de las cirugías abdominales donde se incide la aponeurosis tendrán la posibilidad de desarrollar una hernia incisional. Otros tipos de hernias, como las epigástricas, las de Spiegel y las lumbares, entre otras, se presentan en 3% de la población.
Las manifestaciones que producen las hernias de pared abdominal depende de su localización. Las hernias pequeñas no siempre causan síntomas pero se puede presentar los siguientes:
- Un bulto o protuberancia en alguna parte del tronco, que puede ser tan pequeño que no se ve a simple vista
- Dolor, en particular al toser o hacer fuerza con los músculos cercanos
Generalmente los pacientes se presentan en el consultorio refiriendo una protuberancia (bolita) que ha crecido con el tiempo y causa dolor al realizar un esfuerzo físico. Las hernias crecen y formar un saco que podría "atrapar" una parte de intestino o una porción de grasa que normalmente estaría situada dentro del área del estómago (cavidad abdominal). Las hernias pueden ser muy dolorosas si el tejido queda atrapado y no puede volver a la cavidad abdominal. Cuando esto ocurre, el tejido no recibe suficiente sangre y puede inflamarse o incluso necrosarse (tejido muerto) en esta situación el tratamiento es cirugía urgente. Cuando el contenido atrapado es intestino, el cirujano posiblemente se deba quitar esa parte del intestino y unir los dos extremos con suturas.
En la mayoría de los casos, se puede diagnosticar una hernia mediante la exploración física en el consultorio. Por lo general, el contenido de la hernia se pueden “reducir” o empujar suavemente hacia adentro de la cavidad abdominal. Sin embargo, hay momentos en que la hernia queda en su sitio y no puede volver adentro.
Es poco frecuente que se utilicen métodos de imagen (ultrasonido, tomografía) para confirmar el diagnóstico. Sin embargo, en ocasiones pueden ser necesarios para planear la cirugía y confirmar el diagnóstico en pacientes obesos
No todas las hernias necesitan tratamiento inmediato, pero muchas se deben reparar con cirugía. La cirugía indicada para usted dependerá del tamaño de la hernia, su ubicación en la pared abdominal, si es la primera vez que se opera de la hernia y su estado de salud en general.
El abordaje para reparar la hernia puede ser por medio de cirugía abierta o por cirugía laparoscópica.
Cirugía abierta
Durante una cirugía abierta, se realiza una incisión cerca del sitio de la hernia, se explora los tejidos alrededor de la hernia y se regresa el contenido a su sitio (cavidad abdominal). A veces es necesario cortar tejido para reparar la hernia. A continuación, se sutura las capas de la pared abdominal para que ninguna estructura de la cavidad abdominal pueda salir por el mismo sitio. En la mayoría de los casos, se utiliza un material protésico (malla), la cual absorbe parte de la presión de la pared abdominal. De esa forma es menos probable que la hernia aparezca de nuevo.
Cirugía laparoscópica
En la cirugía laparoscópica, se realiza el mismo procedimiento descrito anteriormente pero a través de incisiones pequeñas en la piel, por las cuales se introducen pinzas largas y una cámara (llamado laparoscopio) la cual envía imágenes a una pantalla de televisión. En este abordaje también se utiliza una malla para la reparación de la hernia.
¿Cuándo consultar a un médico para valorar una hernia de pared abdominal?
- Cuando tenga una hernia dolorosa
- Cuando el contenido no se pueda reintroducir en el abdomen usando presión suave
- Si presenta náuseas, vómitos o fiebre junto con la hernia dolorosa
- Si la piel que cubre la hernia se torna de color rojo, púrpura, oscuro o cambia de color
- Presencia de dolor, inflamación o una protuberancia en la ingle
- Si tiene una protuberancia o "bolita" en el ombligo o que este localizada el sitio de una cirugía abdominal previa.
Fuente:
- Mayagoitia JC. Hernias de la pared abdominal, tratamiento actual. Segunda Edición 2009 Editorial Alfil.
- UpToDate: Patient information: Abdominal wall hernias.